Mi blog.
Dentro de muchos años entraré aquí y será mi particular baúl (digital) de los recuerdos (no digitales).
jueves, 11 de febrero de 2010
Estamos en crisis.
Estamos en crisis. Hoy mismo me he dado cuenta de lo grave que es esta crisis. Y no me refiero a que la bolsa haya alcanzado un mínimo histórico, ni a que se hayan publicado unas encuestas callejeras en las que la crisis es considerada el mayor de los problemas de los españoles. No. Lo que me ha hecho darme cuenta de lo grave que es la crisis que vivimos ha sido la televisión. Hoy mismo, me he sentado delante de ella y me he puesto a hacer el único deporte que no adelgaza ni un gramo: el zapping. Pues bien, estaba yo poniendo en forma el dedo índice de mi mano derecha cuando he aparecido en la teletienda. Y probablemente por culpa de esa curiosidad innata de los seres humanos que nos hace querer saber más, incluso de las cosas más inútiles, mi cuerpo ha sido obligado a mantenerse en ese canal un "rato", por lo menos hasta saber qué me estaba anunciando. Este proceso no ha sido rápido, pues cómo cualquier persona que haya visto alguna vez la teletienda sabrá, todos los anuncios tienen esas partes en blanco y negro que muestran lo horrible que era nuestra vida antes de comprar el artículo del que se está haciendo publicidad, y luego muestran las flamantes imáganes a color de lo magnífica que será nuestra vida una vez que tengamos el artículo x. Pues bien, ha sido en ese proceso de diferenciación entre los millones de anuncios de teletienda que he visto, todos marcados por el mismo patrón descrito, cuando me he dado cuenta de que el objeto publicitado en cuestión era una bosita de té. Sí , así es. La decadencia ha llegado. Esto es crisis económica y lo demás son tonterías. El canal dirigido al consumidor en potencia ha pasado de intentar vendernos objetos que llegaban a superar los 1000 euros y que proponían maravillas a intentar convencernos de que unas bolsitas de té de "sólo" 50 eurazos nos adelgazarían, harían más altos y guapos y, en el caso de las mujeres, reafirmarían nuestro pecho. Por esa razón, yo hago un llamamiento a los políticos del mundo: si el primer canal consumista del mundo sólo es capaz de vender bolsitas de té, ¿no creen que sería una buena hora para poner remedio a esta crisis que persiste en su intento de minar cualquier atisbo de consumismo que tenga el valor de salir a la luz? Ahí dejo esa pregunta. El que la sepa responder, por favor me lo haga saber.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Los quarterbacks y animadoras del blog:
-
Hay tres formas de transmitir calor: por conducción, por convicción y por radiación. Te las explico:
-
¡Lo que hay de prodigio en los Tigger, es lo prodigiosos que son! ¡De goma son sus cabezas! ¡Sus colas de resorte son! ¡Y bailan, b...
-
Ya había escrito antes algunos trucos para ser una chica dura. Aquí los continuaré en un capítulo especialmente dedicado a contener las l...
-
Ha conseguido que una canción que antes me recordaba a otro ahora me recuerde a él. Y luego dicen que la magia no existe. — ¡Una prosopo...
-
No sé si son los exámenes o el hecho de llamarme Cris y que desde pequeña muchos me llamaran Crispi, Crispis o derivados; el hecho es que úl...
-
Elegí estudiar ingeniería para poder decir que suspendí 5 asignaturas y que la gente no me crea tonta, sino que lo consideren todo un logro ...
-
Hace tres años y medio que no escribo. Mentira, escribo, pero ya no escribo, escribo. No sé si me explico. Hace tres años (eso sí) que no en...
-
Aún no lo sabes, pero me quieres. Lo acaba de decir la margarita que deshojé. Y si lo dice la margarita no puede ser mentira. Me quier...
No hay comentarios:
Publicar un comentario