Mi blog.

Dentro de muchos años entraré aquí y será mi particular baúl (digital) de los recuerdos (no digitales).

lunes, 10 de octubre de 2011

Cumpleaños

Un año más (vieja). O un año más (des)aprovechado. No, no me considero una despilfarradora de tiempo. Ni siquiera creo que malgaste ni un poquito. Lo uso, a mi manera. Muchos me considerarán rara, soy consciente. De hecho quedarme en casa un día de fiesta sola con mi música y escribiendo no es un plan típico para 'la juventud'. Pero esas pequeñas cosas me hacen feliz. Así que no son tiempo malgastado. Ni siquiera el tiempo 'perdido' en trayectos eternos de autobús es malgastado. Pensar no es malgastar el tiempo. Tampoco los días tristes. Llotar no es malgastar el tiempo. Antes solía pensar que llorar era mostrar debilidad. Yo no lloraba. Yo era fuerte. Me he dado cuenta de que hasta los más fuertes lloran. Y que la sensibilidad no significa necesariamente debilidad. Así que llorar no es perder el tiempo. Limpiar tampoco, arreglarse, aprender. Nada de eso es perder el tiempo. Te facilita la vida o te hace más feliz.
Tiempo perdido es el que pasaste pensando una declaración de amor que no tuviste el valor de llevar a cabo. El que usaste envolviendo un regalo que no llegaste a dar. El que invertiste en escribir una carta que rasgaste antes de enviar. Tiempo perdido es si luego decides que los frutos de ese tiempo no sirven. Y los tiras a la papelera (de reciclaje). Creo que me repito. Ya dije algo parecido.
En definitiva. Soy un año mayor. Ahora entiendo muchas cosas. Y sé muchas otras. Por fin me han dejado de decir eso de 'cuando seas mayor te lo cuento', 'son cosas de mayores' y demás. Y esos son los detalles que te hacen darte cuenta de que has entrado en su mundo. El mundo de los mayores. Entré un poco al dejar el colegio y convertirme yo en uno de esos 'mayores' que estaban en sus últimos años y a los que los 'pequeños' miraban con envidia. Pero no me siento mayor. De hecho me siento igual que ayer. Y probablemente igual que mañana. Los años no se cumplen de un día para otro, igual que en el colegio aprendimos que no se pasó de la Edad Media a la Moderna de un día a otro. El tiempo transcurre, lento pero seguro. El tiempo transcurre, sin importarle lo que hagamos con él. El tiempo transcurre, y yo sigo dispuesta a aprovecharlo.

Muy feliz cumpleaños para mí.

2 comentarios:

  1. ¿Vieja?... ¡Qué poca vergúenza...!
    No está mal nacer un diez del diez. Felicidades y que llegues a ser una vieja muy feliz (algún dia, aún lejano)

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  2. @Almudena: Al menos más vieja ;) Sí siempre me gustó mi fecha de nacimiento :) ¡Muchas gracias! =)

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